¿Te aburriste de dibujar en un papel plano? La empresa WobbleWorks inventó una manera de hacerlo en 3D sin necesidad de ilusiones ópticas, sino que usando un lápiz que en realidad es una mini-impresora 3D. Hasta el momento es sólo un proyecto prototipo, pero está buscando financiamiento en Kickstarter para llevar la idea al mercado.
El lápiz mide 180mm de largo por 24mm de grosor y pesa 200 gramos. Según dicen sus creadores, usa una tecnología especial que permite calentar el plástico y luego enfriarlo rápidamente mientras pasa por el aparato, para permitir crear figuras. “Aunque el plástico que sale del 3Doodler se puede tocar con seguridad una vez que está fuera del lápiz, en sí mismo el dispositivo tiene una punta metálica que puede llegar a los 270°C”, explican.
El plástico utilizado puede ser tipo ABS o PLA, igual como en una impresora 3D. El proyecto buscaba recaudar USD$30.000 para lanzar el producto al mercado, sin embargo la recaudación explotó superando los USD$700.000 al poco andar (gracias Cabezón). Sus creadores aseguran que ya han conversado con fabricantes en China para crear el producto, que se vendería por USD$75 al usuario final.